Para la industria móvil, el resultado de la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones 2023 es fundamental para tener la certeza de que en el futuro habrá espectro disponible sobre el que construir una mejor conectividad. Aún no se sabe con certeza si será así. El trabajo sobre las Resoluciones que darán forma a las decisiones finales avanzan en los tres temas que tienen un impacto significativo en el futuro de las redes móviles: la banda superior de 6 GHz, la banda UHF y un punto del orden del día con nuevas bandas que se estudiarán para las IMT-2030 (6G) en la CMR-27.
Capacidad de velocidad: banda de 6 GHz
En la banda de 6 GHz, la identificación IMT cuenta con un amplio apoyo, y los debates se centran en las condiciones en que podrían desplegarse las redes móviles. Con el fin de proteger los receptores de satélite existentes en el espacio de las interferencias agregadas de las estaciones base móviles, se están considerando límites a la cantidad de potencia irradiada dirigida por encima del horizonte (hacia el satélite).
Disponer de límites lo menos restrictivos posible para proteger el enlace ascendente por satélite, pero evitando restricciones excesivas a las IMT, es clave para poder obtener los todos los beneficios de la banda de 6 GHz para la sociedad. El debate no es trivial: los límites propuestos por Europa/CEPT supondrían una cuarta parte del área de cobertura por estación base en comparación con el potencial de la banda. Otros organismos regionales (África/ATU y los Estados Árabes/ASMG) están apoyando límites menos restrictivos que, en nuestra opinión, seguirían protegiendo el enlace ascendente por satélite al tiempo que permitirían un despliegue eficiente de las IMT en la banda.
El número de estaciones base que se desplegarán en la banda de 6 GHz en toda la región es la principal hipótesis en la que se basan los límites de protección. Una sobreestimación del número de estaciones base conduciría a límites muy estrictos que sobreprotegerían el enlace ascendente del satélite. Nuestras estimaciones apuntan a un despliegue menos extenso en 6 GHz, enfocado en agregar capacidad en zonas urbanas y suburbanas, lo que llevaría a límites menos restrictivos que los de ATU/ASMG para proteger el satélite.
Igualdad digital: Banda UHF
En cuanto a la banda UHF, eldebate continúa con muchas opciones sobre la mesa, desde la ausencia de cambios hasta la atribución co-primaria a los servicios móviles, pasando por distintos tipos de atribución secundaria a los móviles y la inclusión de notas a pie de página adicionales para una atribución primaria para los países dispuestos a adherirse.
Las decisiones de CMR-23 para modificar el Reglamento de Radiocomunicaciones son el resultado de negociaciones para lograr los derechos internacionales que permitan implantar nuevos servicios e introducir más flexibilidad en la banda. Con su postura actual, Europa está perdiendo la oportunidad de obtener los derechos internacionales en la CMR-23 para implantar servicios móviles en la banda UHF cuando la Unión Europea tome esa decisión.
Con una asignación móvil secundaria, Europa se verá limitada por la voluntad de los países del norte de África y Rusia como países vecinos. En cambio, los países árabes están respaldando una asignación móvil primaria en la banda que les permita decidir cuándo se despliegan los servicios móviles.
El futuro de la conectividad móvil: CMR-27 IMT
Sobre el futuro punto del orden del día de la CMR-27 sobre IMT (espectro para 6G) no ha habido mucho progreso y hasta ahora, se ha evitado el polémico debate sobre las bandas que deben estudiarse. Las bandas enumeradas en las distintas contribuciones incluyen 3100 – 3300 MHz; 3800 – 4200 MHz; 7125 – 8500 MHz; 12,7 – 13,25 GHz; 14,75 – 15,35 GHz; así como 6425 – 7125 MHz en regiones no incluidas en la CMR-23.
La CMR-23 es clave para ayudar a garantizar la sostenibilidad de las comunicaciones móviles
El sector de las telecomunicaciones en Europa se enfrenta a un entorno financiero difícil. La rentabilidad es baja y el coste de la financiación va en aumento, una combinación que dificulta la captación de los fondos necesarios para situar la conectividad Europea a la altura de EEUU, Corea y Japón. Evitar la escasez de espectro para las redes móviles forma parte de la receta que nos debería ayudar a alcanzar los objetivos de la Década Digital. Tiene que ocupar un lugar destacado en la agenda de nuestros responsables políticos, que no deben subestimar la importancia de un resultado positivo de la CMR-23.
