Nota Informativa. 
Estuardo Olivares, director país de Telefónica Guatemala, y Óscar Avalle, representante del Banco Mundial en el país, hicieron público el viernes el informe «Cómo las TIC pueden contribuir a mejorar la seguridad en Guatemala».
El documento es fruto de la primera alianza de nuestra compañía con la entidad en Guatemala, donde la violencia consume el 7,3% del Producto Interno Bruto anual, según un estudio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). En general, en Latinoamérica, la inseguridad ha desbancado al desempleo como principal preocupación desde 2007.
La obra se centra en tres tipos de soluciones TIC: la videovigilancia y conectividad ciudadana; los centros de atención y coordinación de emergencias; y las pulseras GPS para casos de violencia de género. Además, aporta las claves de una estrategia de seguridad ciudadana de éxito y muestra ejemplos de uso de las nuevas tecnologías para combatir el crimen y la violencia en Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, El Salvador y Guatemala.
“Para Telefónica la seguridad ciudadana no se limita exclusivamente a la lucha contra la delincuencia sino a crear un ambiente adecuado para la convivencia pacífica en la que se integren de manera coordinada las autoridades y la ciudadanía, con el apoyo de la empresa privada como socio estratégico”, indicó Olivares ante representantes de la sociedad civil, autoridades y periodistas.
Por su parte Avalle señaló: “Las empresas pueden jugar un papel transformador en la promoción de iniciativas para la prevención de la violencia y el fomento del crecimiento inclusivo y la prosperidad compartida”. También destacó la importancia de las alianzas público-privadas para desarrollar proyectos que transformen la economía y sociedad de los países.
Nuestra compañía ha desarrollado aplicaciones y sistemas enfocados a tres grandes áreas: Defensa Nacional, que tiene que ver con el Ejército y los servicios de inteligencia, con iniciativas enfocadas, por ejemplo, a la protección de instalaciones críticas por su valor estratégico para el Estado, a Redes Privadas de Defensa o plataformas tecnológicas específicas que utilizan las Unidades Militares de Defensa (UME); Seguridad Nacional, centrada en la protección y control de fronteras o en la custodia y seguridad en recintos e instalaciones penitenciarias; y Seguridad Ciudadana, donde ha ideado modelos y sistemas propios de conocimiento, infraestructura y gestión aplicados a los tres tipos de soluciones en los que se concentra el informe.
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