En el transcurso de la historia se han suscitado inquietudes similares frente al progreso tecnológico, desde la Revolución Industrial hasta la era de las computadoras ha existido siempre el temor de que las máquinas reemplacen las labores humanas. No obstante, la lección que nos brinda el tiempo es que no es la tecnología la causante de eliminar puestos de trabajo, sino más bien la incapacidad de las personas para adaptarse a los cambios que esta introduce. Por lo tanto, podemos decir que la inteligencia artificial por sí misma no es una amenaza, más bien creo que es una herramienta enorme que tiene el potencial de transformar nuestras vidas y profesiones si sabemos cómo aprovecharla.
La inteligencia artificial en el ámbito laboral
Antes de adentrarnos en el impacto de la inteligencia artificial en el entorno laboral, es crucial recordar que la IA constituye una parte fundamental de la Revolución Digital que se inició hace décadas y sigue transformando nuestra realidad. Según numerosos expertos, se estima que aún quedan alrededor de 70 años para completar esta revolución, que comenzó hace 30 años con la llegada de los ordenadores personales, los microprocesadores y la expansión de Internet.
Como hemos mencionado, la IA no eliminará empleos, pero cambiará el panorama laboral. Aquellos que sepan aprovechar su potencial serán los líderes en esta nueva era. Herramientas como ChatGPT, algoritmos de aprendizaje automático y sistemas de automatización ya están revolucionando industrias enteras. Estas tecnologías no solo aumentan la eficiencia y reducen costos, sino que también generan nuevas oportunidades: desde análisis de datos hasta el diseño de experiencias personalizadas, pasando por roles completamente nuevos que antes ni siquiera existían.
Por tanto, el verdadero desafío no radica en la IA en sí misma, sino en nuestra disposición para aprender y adaptarnos. Las habilidades tradicionales ya no son suficientes, hoy en día se necesita una mentalidad flexible, la disposición para aprender constantemente y la capacidad de integrar nuevas herramientas en nuestro trabajo diario. No es la IA la que desplazará a los profesionales, sino aquellos que comprendan cómo utilizarla para ser más eficientes, creativos y estratégicos.
Además, es importante tener en cuenta que la inteligencia artificial no puede sustituir las habilidades esenciales humanas como el pensamiento crítico, la empatía o la creatividad. Estas son cualidades que ninguna máquina podrá imitar por completo. Por tanto, el futuro del trabajo no será una lucha entre humanos versus máquinas, sino más bien una colaboración entre ambos. Los que logren combinar sus capacidades humanas con las ventajas tecnológicas serán los verdaderos ganadores.
Al final el riesgo más grande no radica en la automatización ni en los avances tecnológicos sino en quedarse rezagado mientras otros progresan. En esta nueva era impulsada por la inteligencia artificial el éxito estará determinado por nuestra habilidad para convivir con estas herramientas aprovechar su potencial al máximo y utilizarlas como aliadas para crecer tanto profesional como personalmente. La clave está en no temerle a la inteligencia artificial sino en aprender a dominarla antes de que otros lo hagan por nosotros.
La Revolución Industrial como ejemplo de transformación
Durante la Revolución Industrial fue inevitable la desaparición de ciertos empleos, no obstante, surgieron nuevas oportunidades laborales y sectores industriales en paralelo a esta transformación histórica. Hubo momentos de conflicto y modificaciones en los modelos contractuales y sociales que formaron parte del proceso de adaptación. Sin embargo, como ha ocurrido a lo largo de la historia, la humanidad avanzó hacia un futuro mejor, con un impacto positivo también en el ámbito laboral.
La Revolución Industrial del siglo XVIII marcó un cambio radical en la economía y la sociedad de la época. La incorporación de avances tecnológicos como el motor de vapor y el telar mecánico tuvo un impactante aumento en la productividad que llevó al surgimiento de nuevas áreas industriales. A pesar de las preocupaciones iniciales sobre la posible sustitución de los trabajadores por máquinas, al finalizar este proceso hubo un incremento en las oportunidades laborales en campos tales como gestión fabril, logística y mantenimiento de maquinaria industrial.
Entre los logros más destacados de esta revolución se incluyen:
Incremento en la productividad
La incorporación de máquinas como la Spinning Jenny y el telar mecánico propició un incremento del 300 % en la producción textil entre los años 1760 y 1850, lo que resultó en una disminución de los costos de fabricación y en una mayor disponibilidad de productos esenciales para una gran parte de la población.
Avances en el transporte y la infraestructura
Uno de los hitos más significativos fue la edificación de más de 8 000 millas (12 800 km) de rieles en los Estados Unidos para el año 1860. Esto transformó el comercio al unir mercados y generar puestos de trabajo vinculados tanto a la construcción como al funcionamiento y cuidado del sistema ferroviario.
El surgimiento de nuevas ramas industriales
La producción de acero experimentó un crecimiento asombroso durante ese período: de 77 000 toneladas en 1870 a 11 millones de toneladas para el año 1900. Este crecimiento en la industria generó millones de puestos de trabajo tanto directos como indirectos en áreas como la construcción y el transporte.
Innovación tecnológica continua
La Revolución Industrial estableció los fundamentos para una era de innovación tecnológica continua en la que el desarrollo del motor de vapor no solo impulsó las fábricas sino también los barcos y los trenes creando así nuevas industrias que demandaban mano de obra calificada.
Estos hitos históricos muestran cómo un cambio tecnológico puede crear más puestos de trabajo de los que elimina en un principio. Del mismo modo, la inteligencia artificial tiene la capacidad de impulsar industrias emergentes y generar empleos especializados que todavía no podemos concebir.
Cómo la automatización impulsada por la inteligencia artificial está generando oportunidades laborales adicionales
Si nos centramos en la automatización impulsada por la inteligencia artificial, podemos ver similitudes a lo que sucedió durante la Revolución Industrial: la tecnología está cambiando el panorama laboral al automatizar labores repetitivas y creando nuevas perspectivas. Esta evolución brinda a los trabajadores la oportunidad de dedicarse a tareas más creativas y estratégicas, al mismo tiempo que aumenta la demanda de profesionales altamente especializados.
Según el Foro Económico Mundial, a pesar de las proyecciones que indican la posible pérdida de 85 millones de empleos para 2025 debido a la automatización, también se anticipa la creación de 97 millones de nuevos puestos, lo que resultaría en un saldo positivo de 12 millones de empleos a nivel mundial. Entre estos nuevos perfiles destacan especialistas en colaboración humano-IA, entrenadores de inteligencia artificial y científicos de datos especializados en aprendizaje automático. En el ámbito de la salud como ejemplo específico, la introducción de herramientas diagnósticas basadas en inteligencia artificial ha dado lugar a nuevas funciones como “Expertos en integración de IA en radiología” e “Instructores médicos para IA», lo que ha resultado en un incremento del 15% de empleos especializados que perciben salarios entre un 30% y un 40% más altos que los puestos reemplazados.
En la actualidad la automatización mediante inteligencia artificial no solo reemplaza labores repetitivas, sino que también estimula el desarrollo económico al crear empleos más especializados y con salarios mejorados.
Incrementar la eficiencia en los negocios
Empresas como Unilever han empleado Microsoft Copilot para automatizar tanto tareas administrativas como creativas y han logrado una reducción significativa en el tiempo requerido para preparar campañas de marketing lo que ha permitido su lanzamiento de manera más ágil y rápida. Después de nueve meses de implementación se ha logrado un aumento del 23 % en la productividad.
Automatización en áreas convencionales
En el ámbito de la industria automotriz se han implementado robots impulsados por inteligencia artificial para mejorar las líneas de ensamblaje y asegurar la calidad del producto final. Esta medida no solo ha generado ahorros significativos en costos, sino que también ha generado una mayor demanda de profesionales especializados en mantenimiento y programación de robots automatizados. De acuerdo con información actualizada recientemente se ha observado que estas tecnologías han resultado en un incrementó de hasta un 30% en la producción al tiempo que se reducen los errores atribuibles al factor humano.
Por poner un caso práctico: DHL mejoró su gestión de envíos al emplear UiPath (una herramienta de automatización de procesos robóticos), lo que les permitió agilizar las tareas rutinarias y obtener entregas más rápidas mientras reducían notablemente los gastos operativos.
Cambio en las labores administrativas
En el ámbito financiero actualmente existen bancos como Raiffeisen Bank International que han optado por utilizar sistemas basados en ChatGPT con el fin de automatizar labores rutinarias como la gestión de documentación legal y bancaria. Esto ha posibilitado que los trabajadores dispongan de mayor tiempo para desarrollar actividades estratégicas y entablar relaciones con los clientes, logrando así potenciar tanto la eficiencia como la excelencia en su desempeño laboral.